Friday, February 20, 2009

PRESENCIA/El Cofre

Era tan sólo la noche callada, silenciada, como un apartado de televisión sin sonido…


PRESENCIA





El Cofre
Un cuento
Por David Alberto Muñoz


Creo que fue esa noche cuando estaba padeciendo o disfrutando del insomnio…todavía no puedo definirlo. La noche se antojaba estar más callada que de costumbre. Podía escuchar el mismo zumbido de algunas moscas parranderas junto con ciertas lombrices que servían de alimento a las lagartijas que no se movían solamente que fuese necesario.

Descubrí enterrado en el parque de las ilusiones un cofre de madera. Creo que era igual al de mi abuela. Ella me llevaba de vez en cuando para verlo, cuando deseaba darme algo. Sacaba una llave que a mí se me figuraba ser la llave de un tesoro, y al menos para mí, era inmensa. Mi abuela doblaba su espalda cuidadosamente, hacía girar la cerradura mientras abría aquel armario diciéndome:

—No le digas a nadie lo que vas a ver dentro de este baúl.

Mis ojos se abrían aún más mientras yo negaba con la cabeza. Mi abuela se burlaba de mí con una risa muy abuelesca, llena de un cariño que extraño desde que ella murió.
Aquel bulto que encontré esa noche era una especie de arca ya bastante vieja. Me tomó varios minutos sacarla de entre la tierra y sacudirla para intentar abrirla. Volteé para todos lados porque tenía la sensación de que alguien me estaba observando…Era tan sólo la noche callada, silenciada, como un apartado de televisión sin sonido, solamente podía ver imágenes, animales de desierto moviéndose sobre mi cuerpo, y desde el mismo cielo la mirada curiosa de Kali, diosa del mal.

No sabía cómo iba abrir aquel mueble semipesado que desprendía un olor a madera vieja, algo mojada, un aroma a siglos de antaño que seducía más a la misma vez provocaba cierta repulsión.
Pude sentir un latido que provenía de adentro.

Levanté los ojos y vi a la diosa de la oscuridad sonriendo maliciosamente ante mis acciones.

—¿Cómo puedes ser criatura de la aniquilación y Diosa Madre?—la cuestioné gravemente.

Intenté abrir aquel bulto pero no pude. Y no era que estuviese cerrado, más bien parecía como si después de tantos años el metal ya estaba oxidado, la madera vieja…se había cerrado automáticamente. Lo sacudí varias veces intentado ver qué pasaba…pero nada…sólo el pinche silencio de aquella noche clara, pintada por una hermosa luna llena, con constelaciones enganchadas cuidadosamente, como procurando que todo ojo humano las viese, mientras la mirada de Kali caía sobre mi propia alma…me atemorizó por unos instantes.

Después de un rato, ya cansado lo aventé con mucho coraje.

Fue cuando se abrió.

La escena que siguió no estoy seguro si fue real o verdadera, si fue mentira o ficción, si brotó del espíritu o la carne, o si fue diosa o dios.

De su interior brotaron tres almas encontradas. Un viejo, una hermosa mujer, y una frase jamás explicada.

El anciano sonreía conalegría, movía sus manos casi a cada instante, su semblante era ameno, despejado, proyectaba paz. En la espalada portaba tatuado un águila con el pico levantado. Sus venas parecían ser serpientes que rápidamente se deslizaban por su sangre llevando aliento de vida e incitando a la mente a seguir pensando. Parecía nadar por el mismo aire que de pronto comenzó a soplar dejando huella de que el tiempo siempre permanece, pero no deja de caminar. Lanzaba brazadas anchas, sus piernas pataleaban avanzando hacia la luna para después de algunos minutos quedar paralizado, y caer nuevamente en círculos dentro de aquel cofre.

La mujer con más cadencia enseñó sus ojos verdes, brillosos. Su cabello castaño descansaba sobre sus hombros, sus labios pintados de color rosa estaban completamente cerrados retando a quien la observaba a hacer algo. Maquillada a la usanza contemporánea no permitía que su rostro mostrase ningún defecto. Al contrario, seducía para después mostrar su cuerpo casi desnudo que al acercarse a uno, parecía ser una rara substancia de silicona con color a miel, olor de gardenias, que excitaba, provocaba, estimulaba, deseándola como todo hombre cuando ve a una mujer.

Me envolvió casi ahogándome, sentía sus muslos fuertes; casi con desesperación bebía de su pecho un brebaje semejante al alcohol de mi propia imaginación, para a los pocos segundos desaparecer con la misma rapidez con la que había surgido.

Fue entonces cuando la frase nunca explicada se pegó literalmente a mi paladar, provocando un extraño sabor dulce amargo, y tal vez sin querer, la escupí con mucha violencia, porque en aquel instante me di cuenta de lo que había descubierto…

Maldita y bendita serás
Con amargo llanto reinaras
Mientras la alegría te cubrirá
Porque cuando entiendas ya no podrás

En medio de rencores vivirás
Arropado de cariños, pasiones y aventuras
Cuando te des cuenta ya no estarás
Habiendo estado siempre y sin soledad

Adulterando tus pensamientos encontraras
Sed, satisfacción y serenidad
Todo aquí lo sufragarás
Incluyendo favores, escalofríos y bienestar

Somos nosotros tres almas encontradas
Tu futuro, lo que fuiste y lo que serás
En aquel cofre que encontraste
Aunque lo entiendas ya nunca lo tendrás

© David Alberto Muñoz

Ph.D.Faculty Philosophy & Religious Studies

Chandler-Gilbert Community College

2626 East Pecos Road

Chandler, Arizona 85225-2499

(480) 732-7173

david.munoz@cgcmail.maricopa.edu

Sunday, February 8, 2009

PRESENCIA/Oxygen

Maybe life is only an instant lost in a desert, with water, yes, lots of water, wishing to die but being afraid of it at the same time, and with a clock that says: “your time is up.”

PRESENCIA



Oxygen
A short story
By
David Alberto Muñoz
The phone rang while I was taking a shower. I like to take a shower every day. Even on weekends. I know some people dislike water sometimes. I am not certain why but to each its own don’t you think? Even if it is really cold and the water heater is not working, the most excelling experience of my day is to fell the water running through my body. Somebody told me once that oxygen comes from the water. Is that true? I am not really sure about that and actually I don’t care. What matters is the sensation of freshness you get when your head hits the water. I breathe deeply, exhaling deep oceans of life.
Anyway, I had to walk across the bedroom because the phone was left next to the treadmill. Yes, I used to use it before I started swimming. My back was hurt. Plus I am not a kid anymore. I wish I was. If I could know what I know today and be 17 years of age I would be king of the world. Sometimes I feel like that though. When I manage somehow to stop time and truly enjoy the moment I feel like I could climb to the heavens above and spin through the darkness of the hell contaminating the entire world with a scent of hope.
Hope? Yes, I think that’s what we all need, hope.
The phone call was from my job. They were as they put it: “letting go of some people.”
“Are you firing me?” I asked.
“No Mr. Bullock! We want you to know it is not because of incompetence or anything like that. The economy is having a lot of problems as you know. Millions of people are losing their jobs. There have been cuts in the budget of more than six million dollars and our company is not that big if you compare it to some of those big guys.”
“What I am supposed to do?”
“We are all in the same boat. If I could help you I will, if the company could help…but this is the reality of it. Those of us that still have a job want to keep it. It is not personal Mr. Bullock that is just the way it is. Best wishes Mr. Bullock!”
They just hanged up the phone.
I have been working in that company almost my entire life. I can say that I have almost no memory before I began to climb up the ladder to where at least I believed I was. And all of the sudden, everything collapsed. I have a family like everybody else. Bills to pay, credit cards, car payments, mortgage, plus the basic things like food and clothes and everything else I have gotten myself into it. What was I going to do?
That morning I made a decision. I was not going to allow my family to suffer just because the stupid government was facing a deficit. They are using my money to get a fix! It is not fair! The entire world is facing a deficit! It is frustrating to see how the company continues to waste money in stupid things while many of us are force to go into welfare and unemployment. I get angry, irritated, exasperated…and yet…when we compare ourselves to other nations in the world I come to realized how bless we truly were.
I guess all I can do is hope.
What really puzzles me is that in life goes on without a hitch. There are still people buying at the malls, eating at the restaurants, drinking at the bars, individuals competing in international sports events, people going to churches, neighbors fighting each other, adolescents making out in a park with bright daylight, festivals taking place, Barbie celebrating 50 years of age, the Pope accused of defending a bishop who question the Holocaust, while millions of people are looking for a job.
I don’t get it!
I don’t know what’s going to happen. Sometimes it seems like the end of the world. Like a prophecy spoken through one of the prophets. It doesn’t matter which one! I am tire of all the bickering because everyone wants to be right. Anywhere you look the same problem is taking place. If hope disappears then the world really is going to hell. Perhaps this is why life is too short. Because we could never handle all the pain and suffering, all the injustice we commit. Maybe life is only an instant lost in a desert, with water, yes, lots of water, wishing to die but being afraid of it at the same time, and with a clock that says: “your time is up.” We all know it, but we are too selfish to fix it. While children are dying of hunger we buy a Blackberry, while we throw away food someone wishes they could have it.
After that phone call our life changed. We learned to live day by day. We don’t make plans for the future. We prepare for today and perhaps for tomorrow. We have learned not to hate so much but to appreciate the help of others. We try not to judge even though we can never make people happy. There will be always someone speaking behind our backs. And most likely we will speak behind the back of others. I think this is the only way people can react, through having needs, through experiencing real suffering, through realizing that we are not gods, we cannot shed our old skin and turned the time back, time weights upon us, leaving a mark, scratching our own soul with the realization that at least for some time we were alive.
The phone rang while I was taking a shower. I like to take a shower every day… Somebody told me once that oxygen comes from the water…is that true? I breathe deeply, exhaling deep oceans of life…hoping…yes…just hoping…with the oxygen I have left.
© David Alberto Muñoz, Ph.D.
Faculty Philosophy & Religious Studies
Chandler-Gilbert Community College
2626 East Pecos Road
Chandler, Arizona 85225-2499
(480) 732-7173
david.munoz@cgcmail.maricopa.edu